22 de febrero de 2006

¿Qué es la Patria?

He llegado a una conclusión. Mejor dicho, a un hallazgo, a una adquisición. Probablemente se la robé a alguien y ahora no estoy haciendo más que reproducir esta idea, que flotaba en el aire, de un modo torpe y estólido. En cualquier caso, quiero compartirla con ustedes.
La idea es la siguiente: ¿qué es la Patria? La Patria es el lugar y el tiempo del afecto, su ubicación espacial y temporal. Las coordenadas espaciotemporales del amor, que hay que hacer, que hay que construir; y del odio, que está desde siempre, que siempre estará, y contra, con y por el cual hay que luchar.
La Patria, entonces, está necesariamente ligada a la vida, a lo vital, a lo viviente. Sólo existe en tanto hay vida, y una forma eminentemente humana de vida, compenetrada afectivamente, en reciprocidad, de un modo vital. Porque, para que haya Patria, entonces, deberá haber quien ejerza y realice el afecto. Deberá haber, diría analíticamente, un sujeto de afecto; y como contrapartida y complemento un objeto de afecto, que no será, al fin y al cabo, sino y no más que un sujeto más o menos cosificado. Debe haber quien viva, y quien muera.
Hay quienes dicen, por ahí, que la Patria implica como sujeto fundamental al pueblo. Sea lo que sea que el pueblo fuere. Yo creo (es decir, quiero) que ciertos elementos no pueden participar de esta comunión conmigo, no pueden compenetrarse afectivamente, más que como objetos del odio: los ortivas, los carneros, los vigilantes, los soberbios de mediocridad pretensiosa y engreída, los mentirosos de vocación, los estúpidos por comodidad, los hipócritas militantes, los ventajeros que aprovechan las ventajas sin dar nada a cambio, sin resignar ni un ápice de sí, sin reciprocidad... tampoco los egoístas.
Sin dudas, creo que pensar qué es la Patria y de qué se compone, y a quienes se ama y a quienes se odia y por qué es una definición política. No se trata de algo relativo. Esto no es más que un discurso, que algo pensado, que pensamiento, sostenido del único modo posible: sobre pasión. Cuando sea también acción, entonces será. Por eso, a todos los que dije al principio, a ellos en mí y a ellos en mis amigos, hermanos, compañeros, hijos, mujeres, padres, enemigos agonales y otros... ¡Odio! Y a mis amigos, hermanos, compañeros, hijos, mujeres, padres, enemigos agonales... también, "amarlos como sea, para no volver jamás".
Por último, pienso ahora que con la Patria ocurre, además, algo similar o análogo a lo que nos sucede con nuestras mujeres o con nuestros varones (con nuestros objetos) a quienes amamos y odiamos: nunca es una ni única solamente, nunca es eterna, ni inmóvil, ni inmutable, ni está circunscripta ni limitada. Porque es vida, es lo uno y lo múltiple, es también el devenir. Pero en ella y por ella, en el devenir, se realiza el afecto, la comunión humana. La Patria es, como la amada, vital. Pero como la amada, no se limita, sino que se proyecta o muere.
Escribo esto, que a alguien o a algunos he afanado y que ahora reproduzco con mi forma y bajo mi responsabilidad, y lo pongo en este lugar para quien lo lea, porque a otros seres a quienes podría amar u odiar jamás podré ni podría escribirles un correo electrónico. Algunos de ellos tal vez ni dominen el castellano, ni sepan leer o escribir, ni estén vivos ahora, ni existan, o tal vez simplemente no les importe. Como puede ser que no les importe a ustedes. De algún modo, ustedes son los destinatarios de este mensaje porque sí.
Ahora, al final de todo esto, voy a poner unos versos que me gustan porque dicen más y mejor todo esto que yo quise contarles.

"Todo es en vano si no hay amor,
cantar esta frase me ha nacido,
recordar un grato momento vivido,
apagar mis sedes con un suspiro.

"Sentir los pasos del cataclismo,
abrir la concha de un mundo distinto
donde el pasado ha fallecido
y esta agónica espera también.

"Eclipsar con mi voz el firmamento
y transformar a la gente.
Que ya no piense en sí mismo el cagador
ni la clase dirigente.

"Todo es en vano si no hay amor.
Desde el artista, hasta su contratador.
Desde el agente, al comisario.
Desde el maestro, a su alumnado.

"Desde los padres, hasta sus hijos.
Desde el predicador, hasta sus fieles.
Desde el curador, hasta el paciente.
Y todo lo que humanamente pueda ser...

"Incorregibles nubes de hampa
nutridas por injusticia,
desaparezcan con solo olvidarlas
y la verdad honre la vida".
Ricardo Iorio, Todo es en vano si no hay amor.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

¿A qué viene, de vuelta, esta idea de Patria? Me resulta un poco ingenua la apelación afectiva para definir algo que no es, en todo caso, más que una representación de las formas que adopta la vida de conjunto de las poblaciones. Egoístas, miserables y fallutos hay en todo grupo. El problema no es la inclinación afectiva sino la estructuración de las acciones así inspiradas.

Anónimo dijo...

Solo prueba,
prueba reunir el mundo disperso
Solo prueba, prueba reunirlo.

Mundo Disperso, Luis A.Spinetta.

Goa dijo...

Estoy de acuerdo en que las acciones presentan una estructuración específica, y que de su estructuración deriva el carácter global de la vida compleja de conjunto de los sujetos. Pero creo que la "apelación afectiva" puede permitirnos poner sobre la mesa el punto en que los elementos (cfr. Una concepción ontológica) se combinan y estructuran a partir de unas formas específicas. El punto en que las acciones particulares, como acontecimientos, constituyen por sus formas e inclinaciones la base de un tipo específico de vida de conjunto. Gracias.

Anónimo dijo...

yo me considero un ciudadano del mundo no deberia existir fronteras ni guerras estùpidas por defender una digamos "patria"

Anónimo dijo...

lo de la patria no tiene nada que ver con lo que estoy buscando eso es un poema no es la verdadero significado sobre la patria ¡¡¡NO ME GUSTO!!!esto es lo peor ¡¡SON LOS PEORES!!!

karol dijo...

esto no es lo que estoy buscando ¡¡¡SON LOS PEORES DE TODO EL MUNDO HAY MEJORES RESPUESTAS QUE ESTA!!!y este no es el verdadero significado sobre la patria esto es un poema todo esto esta mal ok SON LOS PEORES.....